Terapia Individual
La terapia individual abre un proceso hacia la sanación integral. Ampliamos posibilidades, conciencia y comprensión. Esto nos lleva a una vida más plena y a más confianza en nosotros.
Vivenciar la relación terapéutica con plena conciencia nos ayuda a comprender las relaciones “de fuera” y a moldearlas libremente. Pero también nos ayuda a sostener conflictos y aclararlos. La devolución sincera nos aporta un clima de mutuo respeto y partiendo de ahí podemos asumir la responsabilidad de nosotros mismos y de nuestra vida.
En toda persona hay un impulso hacia el crecimiento que puede estar bloqueado por experiencias que nos han herido. Trabajar con los patrones que impiden el flujo libre de la energía vital posibilita volver a la autenticidad y la espontaneidad en relación con uno mismo y con los demás. Así profundizamos en la confianza en nuestras decisiones y acciones. Al mismo tiempo crece el valor para escuchar la voz interna y caminar por el sendero propio.